Parte 1. Los coches de ayer, de hoy y de mañana
¿Cómo han cambiado los automóviles actuales respecto a los del pasado y cuáles serán los cambios futuros? ¿En qué medida influyeron e influirán estas transformaciones en el sistema de frenos y sus componentes? Para responder a estas preguntas, en esta primera parte analizaremos la evolución de los automóviles hasta nuestros días y, sucesivamente, en la
segunda parte de "Frenos del futuro", veremos las principales tendencias que ayudarán a plasmar el
coche del futuro, en especial:
- el respeto del medioambiente
- la seguridad
- la movilidad
Por último, en la
tercera parte estudiaremos a fondo los efectos de estas transformaciones sobre el sistema de frenos y, en general, sobre el mercado de los recambios.
De los coches del pasado a los del futuro: ¿qué ha cambiado?
Durante las últimas décadas, los automóviles han sufrido diversas transformaciones; sin embargo, como veremos a continuación, sus características principales han permanecido inalteradas. Pongamos como ejemplo el Golf lanzado al mercado en 1975, es decir, hace más de 45 años.
Si analizamos cinco modelos con motor de gasolina similar, del Golf I de 1975 al Golf VII de 2012 (ver la tabla 1) podemos ver que, a lo largo de los años, han ido aumentando el peso del vehículo y la velocidad máxima y, por tanto, la potencia del motor. Se trata de características que han sufrido transformaciones similares en la mayor parte de los vehículos de las últimas décadas.
El peso aumentó por múltiples razones, en especial, debido al aumento del tamaño del vehículo, el mayor número de dispositivos de seguridad como, por ejemplo, las barras de las puertas y los airbags, y la incorporación de los dispositivos electrónicos.
El aumento del peso y la velocidad obligó a utilizar sistemas de frenos cada vez más potentes que pudieran disipar la energía cinética y, naturalmente, el calor que se genera durante la frenada.
Sin embargo, no podemos pasar por alto el hecho de que, tras 130 años desde su invención, los componentes principales del automóvil no parecen haber sufrido cambios importantes:
- cerebro: el conductor
- corazón: un motor de combustión interna
- piernas: las ruedas.
Los vehículos del futuro: tendencias principales
El futuro del automóvil, según la opinión de la mayor parte de los expertos, estará condicionado por tres tendencias principales:
- medioambiente: reducción de las emisiones y electrificación de los propulsores
- seguridad: sistemas de asistencia para la conducción cada vez más avanzados
- movilidad: un modo nuevo de vivir la relación con el automóvil.
Este último aspecto está condicionado por una movilidad pay-per-use (pagar por uso) más apreciada por las nuevas generaciones: la generación Y no está interesada en tener un coche, prefiere utilizar una aplicación para elegir el modo de transporte que mejor se adapta a sus necesidades en cada momento.
En general, si bien es evidente que el medioambiente, la seguridad y la movilidad condicionarán el futuro del automóvil, también lo es que los componentes sufrirán transformaciones importantes y que uno de ellos será el sistema de frenos, objeto de la segunda parte.